Happy kids informa…………………………… 26- septiembre 2020
Entendemos que las familias son fundamentales para que los niñ@s reciban una educación afectuosa y desarrollen habilidades que necesitan para ser parte de la sociedad. El desarrollo de este afecto no se basa en la genética, sino en relaciones significativas. Una familia es mucho más que resolver las necesidades básicas de los niñ@s como la alimentación y el vestido, pues tiene una gran incidencia en el desarrollo social y emocional de todos los seres humanos.
Allí adquirimos las habilidades necesarias para afrontar la vida de adultos y desarrollar todo nuestro potencial. Nuestras familias nos conducen en formas de ver el mundo, pensar, comportarnos y valorar la vida y la de los otros.
La familia les ayuda a los niñ@s a aprender quienes son, desarrollar su personalidad y les brinda apoyo emocional. El ambiente en que crecen los niñ@s define elementos fundamentales para el resto de su vida.
La familia es donde aprendemos a sociabilizar:
Tal como ya comenté, nacemos y (en la mayoría de los casos) crecemos al interior de una familia. Allí, aprendemos a relacionarnos con otras personas, a cómo resolver los conflictos, a compartir con otros, y por supuesto, las reglas básicas del vivir en sociedad.
La familia nos entrega valores y creencias:
Ya que aprendemos a relacionarnos con otros desde nuestra familia, también aprendemos a mirar el mundo y ubicarnos en él. Aprendemos normas, y formamos nuestro sistema de creencias y valores.
En familia aprendemos de nuestro mundo emocional
La primera red de apoyo emocional que tenemos a lo largo de nuestra vida, incluso antes de nuestras amistades, es nuestra familia.